¡Bienvenidos!

Bienvenidos al juego,
se recomienda seguir al pie de la letra cada exhortación que aquí se detallan.

Primero debe seleccionar el tipo de vida que quiere, 
comprar,
comprar y comprar hasta que sus deudas sean del tamaño de las colas para comprar pañales, 
solo consumir,
acumule tantos bienes materiales como su memoria pueda recordar,
si pisotea su humanidad,
¡no se preocupe!,
para esos daños colaterales tenemos a su disposición una generosa lista de iglesias,
en las que puede adquirir un combo especial;  tres absoluciones,
dos plegarias y un arrepentimiento por la atractiva oferta de un diezmo.

Si la religión no es lo suyo le tenemos opciones alienantes de auto-ayuda, desde el dilema del famoso queso,  hasta la pobre vaca.

Busque la casa,
carro, 
la mata de mango y el perrito para ser aceptado,
querido y respetado por personas que usted no conoce.

¡Anímese a jugar!, 
le garantizamos que no lo disfrutará.

Advertencia: se ha determinado que pensar es contraproducente para su felicidad.